
Las casas de apuestas han decidido poner fin a la publicidad durante eventos deportivos en vivo, una medida que responde a la creciente preocupación sobre la influencia de estas promociones en los espectadores, especialmente en los más jóvenes.
Este cambio busca reducir la exposición de las apuestas en momentos clave del juego, evitando que los fanáticos se vean impulsados a apostar de manera impulsiva. En muchos países, las regulaciones sobre la publicidad de apuestas se han endurecido, y esta decisión podría ser un paso hacia un entorno de juego más responsable.
Si bien el sector del juego online sigue en auge, los operadores están adoptando estrategias más éticas para promover sus servicios. Aun así, los aficionados a las apuestas deportivas pueden seguir disfrutando de promociones y bonos, pero con un enfoque más controlado y responsable.